El zumo de tomate ecológico es más nutritivo y más salutífero
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Por: Oriol Avila Montesó
Presidente del Centro de Estudios Naturistas
Un estudio del Grupo de Investigación de Antioxidantes
Naturales de la Universidad de Barcelona (UB) demuestra que el tomate – la
hortaliza que más se consume en España, tanto fresca como procesada- es más
nutritivo si proviene de cultivos ecológicos.
La diferencia radica en la cantidad de polifenoles,
“compuestos de origen vegetal de gran interés nutricional y que pueden proteger
al organismo contra enfermedades
cardiovasculares, degenerativas y cancerígenas, entre otras”, explica Rosa M.
Lamuela, del Dpto. de Nutrición y Seguridad Alimentaria.
Según Ana Vallverdú-Queralt, primera firmante del estudio,
“los resultados se podrían explicar por los mecanismos de defensa de las
plantas según el tipo de abono empleado en el cultivo ecológico o en el
químico. En todos los cultivos, el factor más importante para el crecimiento de
la planta es el nitrógeno. Ahora bien, en el caso de la agricultura química,
este nitrógeno se puede añadir a la planta como nitrógeno soluble, como
fertilizante, etc., mientras que en los cultivos ecológicos, la planta no
recibe nutrientes artificiales y reacciona activando mecanismos de defensa que
aumentan los niveles de polifenoles. En consecuencia, las plantas de
agricultura química se pueden volver menos resistentes a enfermedades y
presentar un contenido más bajo en nutrientes, minerales y metabolitos
secundarios”.
El tomate (Lycopersicum esculentum), bien maduro es
alcalinizante de la sangre y tiene la propiedad de favorecer la digestión de
los almidones y féculas, por lo que es muy acertada la típica combinación
catalana de “pa amb tomàquet” o bien sazonar arroces, patatas o pasta con
kétchup, pisto o zumo de tomate eco-biológico.
El tomate, en cualquiera de sus presentaciones, por su
poder alcalinizante y antioxidante es beneficioso para quienes sufren de
reumatismo, gota, artrosis, artritis, estreñimiento, etc. Ayuda a conservar la
vista, por su elevado contenido en licopeno y carotenoides.
Al contrario de lo que ocurre con otros frutos, la
piel del tomate debe desecharse ya que puede causar problemas.
Bibliografía:
El tomate. Sus virtudes curativas.
R.
Garrido. 125 páginas. 12 Euros
Centro
de Estudios Naturistas, Barcelona
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